Hay quienes dudan de usar un tono fuerte de labial por miedo a que sea "demasiado" y más aún en un look casual, pero la clave está en mantener el resto del maquillaje sencillo. Si llevas labios rojos, mantén ojos y cejas en un estado neutro, pero definido. Puedes delinear los ojos y peinar tus cejas, y añadir un poco de brillo debajo de los ojos y en los pómulos para un look minimalista.
También te aconsejamos probar con distintas tonalidades para encontrar el color perfecto para ti, y si aún no te animas por completo a un rojo vibrante, puedes hacerlo poco a poco comenzando con un labial de tono suave y aumentar su intensidad lentamente. Para completar tu look, no olvides combinar tu labial con un esmalte para uñas del mismo color.
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